Bad Bunny no solo es un fenómeno global: es un artista que sabe volver a casa para rendir homenaje a sus raíces. El cantante puertorriqueño, tres veces ganador del GRAMMY®, dio inicio a su histórica residencia “No Me Quiero Ir de Aquí” en el emblemático Coliseo de Puerto Rico con tres noches consecutivas completamente sold out.
Así arranca una serie de nueve fechas exclusivas para residentes de la isla, en un gesto sin precedentes que celebra el orgullo boricua. Cada noche, 15,000 asistentes viven un espectáculo de más de tres horas donde la música, el arte y la identidad cultural se entrelazan.
Y es que más que un concierto, Bad Bunny ha creado una experiencia inmersiva que transforma el escenario en un lienzo vivo: una gigantesca pantalla LED que envuelve el espacio, proyecciones llenas de color, efectos visuales, pirotecnia y una narrativa que conecta con el alma de Puerto Rico.
“No Me Quiero Ir de Aquí” es una carta de amor a su tierra. El show rinde tributo a los sonidos tradicionales de la isla, al talento local y a la historia que ha moldeado su carrera. Durante el recorrido musical, Bad Bunny interpreta los éxitos que han marcado su trayectoria, desde X100PRE, YHLQMDLG y Un Verano Sin Ti, hasta su más reciente Nadie sabe lo que va a pasar mañana. Cada tema despierta una oleada de emociones: nostalgia, orgullo y la certeza de que Benito, como le llaman sus fans, no olvida de dónde viene.
Con esta residencia, Bad Bunny no solo establece un hito en su carrera, sino que también eleva el nombre de Puerto Rico ante el mundo, posicionando la isla como epicentro cultural y artístico. Lo que está ocurriendo en el Coliseo de Puerto Rico no es solo un concierto: es historia en vivo.
