Concha Buika: Vivir Sin Miedo


Por Alejandro Rendón @alejandrodecali | Fotografía Natalia Aguilera
Makeup Artist Osvaldo Perez | Hair Emilio Uribe | Styling Genaro Maldonado

Ternura, sabiduría, una energía que contagia alegría y paz. Si buscamos un calificativo para describir a Buika es “Sonrisas”. Este icónico personaje logra comunicar mucho, sin emplear demasiadas palabras.

Eso es lo que hace de Concha Buika, además de una excelente voz, un personaje fuera de lo ordinario, un ser humano que propone un cambio de pensamiento. Es el reto de darnos cuenta que el amor entre todos los seres humanos ya existe, solo hay que abrir los ojos y concientizarlo. Es este el mensaje que abandera esta cantante española.

Concha nace un once de mayo en Palma de Mallorca, capital de la comunidad autónoma de las Islas Baleares. Su familia proviene de Guinea Ecuatorial, un país centro africano, que en épocas de turbulencia política obligó al escritor Juan Balboa Boneke, su padre, a exiliarse junto con la madre de Concha; Honorina Buika y sus hijos a España. Aunque vivió en el Barrio Chino de Palma, es en la comunidad gitana, donde Concha encuentra el espacio para desarrollar su imaginación, aprender de la música, y crecer en experiencias. Ella reconoce que de pequeña le costaba mucho que los adultos la aceptaran, pues su imaginación la hacía pasar por una niña mentirosa, como ella misma lo narra en sus muchas conversaciones. Es esta imaginación la que logra poco a poco hacerla escalar dentro del mundo de la música, y lo que permite que hoy todos tengamos el placer de conocer a este personaje único.

Cantante, poeta, fotógrafa. Todo en los estudios de Imagen estaba listo para recibir a Concha y a su hermana Polita. Era su primera vez en Imagen, yo esperaba paciente por la llamada que haría Polita, para salir a buscarlas. Como todo en la vida, así como cuando te preparas muy bien para un examen y de repente te cambian los planes, de la nada me encuentro cara a cara con ellas, en el momento que me dirigía a buscar un poco de agua. Ellas se habían encontrado con alguien que las guió sin problema, una señal más de que este especial encuentro, estaba destinado a ocurrir.

¿Era Miami lo que esperabas antes de llegar acá?

Yo no tenía expectativas. De todas maneras, esperes lo que esperes de Miami, siempre te encuentras con algo diferente y nuevo. Es una ciudad a la que, depende de donde vengas no es fácil acostumbrarse, pero una vez que te atrapa, te atrapó para siempre.

¿Qué le falta a Miami?

Para mí a Miami no le falta absolutamente nada, es tan joven, que sea lo que sea lo que le falte, tiene el tiempo para luchar por ello. La verdad que por ser una ciudad tan joven, tiene todas las expectativas abiertas, es un baby.

¿Te ves escribiendo la historia de Miami?

Por su puesto, todos los que luchamos por ella.

¿Alguna vez imaginaste tu vida viviendo en Guinea Ecuatorial?

La verdad es que no acostumbro a tener ese tipo de pensamientos, no recuerdo si alguna vez he pensado.

Tienes una canción en el álbum ‘Buika’ que se llama “NEW AFRO SPANISH GENERATION”. La letra de esta canción dice “No soy americana, no llevo en la sangre, ni raza gitana ni paya llevo por dentro.” ¿Cuál era el trasfondo de esta frase, y piensas ahora sí ser americana?

En realidad era, el que tengo el convencimiento de que hasta que los países europeos no reconozcan a sus tribus, no dejarán de tener problemas con ellas. Ya son muchas generaciones de personas que en origen pertenecen supuestamente a otro país a otro lugar, a otro continente, pero llevan muchos años luchando en otro lugar. Yo soy hija de Guineanos mis padres, mis tíos mis hermanos lucharon mucho en España. ¿Qué pasa? por regla general en los países europeos los afro-descendientes, latino-descendientes, indo-descendientes, árabe-descendientes, no tenemos un techo de crecimiento, porque con el dinero compras poder, y eso está difícil para un árabe, o un africano.

¿Crees que hay mucha diferencia cultural entre Europa y Estados Unidos?

Al final después de haber hecho 4 giras de las cuales 2 fueron giras mundiales, me di cuenta de que no existe mucha diferencia entre países. Porque al final cuando llegas a un país que supuestamente está más avanzado que otro, lo único que te encuentras es lo mismo, un montón de gente entregando la vida diariamente para sobrevivir. Las diferencias entre países, cada vez son menos.

¿El hecho de que Estados Unidos tenga un presidente Afro-descendiente y España aún sostenga una monarquía hace a estas dos sociedades diferentes?

Si, en algunas cosas sí. Hombre, sociedades como la española, son basadas en personas que pertenecen a una sola etnia, sociedades que no han desarrollado mucho las ideas de “mixed races”. Ten en cuenta que la sociedad norteamericana, la brasileña, la cubana son sociedades hechas de muchas razas, de la mixtura de muchas culturas ya de hace mucho tiempo. Son sociedades que ya no entienden la idea de que una persona por ser de color tiene que ser migrante.

Por ejemplo en España en Italia, Luxemburgo, el hecho de que tu tengas un color de piel distinto o unas facciones diferentes, todavía a muchas personas les sigue pareciendo “tú no eres de aquí”.

 

¿En qué cree Concha, espiritualmente?

Yo creo en todas las religiones, todos los dioses, todos los papas, todos los pepes, todos los pipis, todos los popos, todos los pupus.

¿A que Dios le rezas?

A todos los posibles, factibles, imaginables por los seres humanos. Todos tienen muy buen rollo, a mí, todas las religiones donde hay música, se come guay, hay gente guapa. Porque al final lo que hace una religión es la fe de sus feligreses sin ella, pues no es nada. Yo creo que la fe de todas las religiones es la misma, que por favor no hayan guerras, que estemos todos bien, que podamos alimentar a nuestros hijos, que no haya gente mala.

Si yo tuviera que decirte a que religión pertenezco, te diría a la del arte.

¿Le temes a la muerte?

No. Le temo a los muertos vivientes, mal llamados hijos de puta. Cada uno tiene su lista.

¿Cómo enoja alguien a Concha?

Bueno, basta con leer un periódico, con poner unos informativos, basta con escuchar a algunos de nuestros representantes políticos.

¿Y con los miembros de tu familia?

Jamás me he enfadado con alguien de mi familia. Antes estábamos hablando de ello. Nunca me he peleado con mi hermana, nunca me he peleado con mi hermano.

¿Cuál es el secreto?

Que no crean en la culpa, que la culpa fue un mal invento, ni en la tuya ni en la de los demás.

Mira te voy a dar un ejemplo: Pongámonos ahora a “hablar” como si fuera una condena, que nadie de nosotros pidió, es algo que tenemos, y estamos obligados a utilizar. Desde que nos levantamos hasta que nos dormimos estamos condenados a hablar. Estás condenado 12, 13 o 14 horas, estás condenado a estar acertado en lo que digas, ¡eso es imposible! Alguna jilipollez dirás, alguna tontería dirás, alguna vez meterás la pata. Sin embargo somos muy poco tolerantes a la hora de escuchar. Basta con que la persona con la que estamos hablando, meta la pata un poquito y ya peleamos, ya no nos gusta. Si es tu novio peor, si es tu hermano peor, si es tu padre peor… pero no nos damos cuenta de lo exigentes que nos volvemos, 12 horas de elocuencia ¿quién puede?

Entonces si tú tienes esto en cuenta para contigo, y para con los demás, seguro que peleas menos.

¿Qué vicios tienes?

Escuchar mierda tío, ese es un vicio muy malo. Cosas que no tienes por qué estar escuchando, personas que a lo mejor no tienes que escuchar. Ideas que no tienes por qué escuchar, miedos que no te corresponden.

Si te dan a elegir entre una noche del sexo más romántico con la persona que más deseas y una noche de tragos y charlas con el personaje que más admiras de la historia. ¿cuál elegirías?

¡Las dos!, yo nunca pierdo “tronco”.

¿Qué defectos tienes?

No tengo defectos, solo virtudes. Igual que tú.

¿Cuál es el mejor regalo que le puede dar alguien a Concha?

Sinceridad, con eso yo soy feliz.

¿Con qué y con quién prefieres emborracharte?

¡Sola!

Hay una apertura enorme de la sociedad en estos momentos frente al tema de la diversidad sexual. ¿Crees que estamos avanzado frente al tema?

Claro que hemos cambiado muchísimo, gracias a Dios. Menudo retraso, hoy en día seguir aparcados en esas cosas teniendo tanto que solucionar.

¿Crees que el ser humano es bueno por naturaleza?

Encuentro que habría más gente mala si pudieran. Ejemplo el típico compañero de trabajo que es un santo hasta que lo ascienden a jefe y se convierte en cabrón.

¿El poder corrompe?

El credo de poder. Pero en el fondo creo que los buenos somos más lo que pasa es que los malos hacen más ruido.

Alguna vez te identificaste como una defensora de la marihuana y el hachís, ¿por qué crees para la sociedad es tan difícil aceptar la libertad de las personas frente al tema?

Depende de los miedos y de la publicidad que se haga de todo. A la sociedad no le cuesta nada aceptar lo que bien se presenta, lo que se presenta como una amenaza entonces la sociedad le tiene miedo. De todas maneras yo soy defensora de todo lo que Dios puso en la tierra. Y al final es una planta, y veo a la sociedad aceptando cosas que son tremendamente más extrañas y horribles. Veo que hay mucho drama con todo esto, existiendo tantos químicos y venenos en las comidas que nos dan y que nos venden como algo bueno para nuestros niños. Entonces no entiendo, hay mucha hipocresía con todo eso. No es que sea defensora de algo, yo no siento que haya que defender la marihuana, creo que se defiende solo, lleva ahí mucho antes de que yo nací y seguirá ahí mucho después de que me muera. Lo que sí siento es que sí podríamos ser un poco menos hipócritas con algunas cosas tan banales.