EV Insurance Corp, de la resiliencia personal a una red de protección familiar

Escrito por:  Luisa Rangel, Fotografía: Alex Luna, Maquillaje: Valentina Otero, Peinado: Dayana Denis, Estilismo:  Gio Moros Miami, Locación: Black Box Media

Eddy Vera no llegó al mundo de los seguros por casualidad, sino por convicción. De sus inicios en el mercadeo en redes a liderar EV Insurance Corp, ha convertido su historia personal en un modelo de protección real para miles de familias hispanas.

La historia de Eddy no es la de alguien que eligió este camino porque fuera el tradicional o el esperado. Después de trabajar en redes de mercadeo, donde funcionaba bajo un sistema de influencias digitales, se encontró sin ese código de mercadeo, sin ingresos estables. En ese momento empezó a vender comida saludable personalizada como un sustento temporal. Pero la vida tenía otros planes: durante una sesión de fotos, la invitaron a una conversación sobre seguros. Ella recuerda haber pensado que ese negocio era distinto porque “ayudaba a personas… y por consecuencia generaba ingresos”.

Esa claridad fue el detonante. La decisión tomó forma más profunda cuando recordó su propia experiencia con la enfermedad.

 “Mi vida cambió por completo. A los 15, el diagnóstico fue Guillain-Barré. Dejé de mover mis piernas. Luego, una recaída afectó todo mi cuerpo. Pasé meses en rehabilitación. A los 19, ya viviendo en Estados Unidos, me diagnosticaron cáncer de ovario. Me preguntaba ‘¿por qué a mí?’, hasta que entendí que la pregunta no era ‘por qué’, sino ‘para qué’. Hoy sé que fue para formar carácter y para servir”. Fue en ese momento cuando comprendió, con dolor y claridad, el alto costo emocional y económico de no estar asegurada. “Sé lo que es enfermarte y endeudarte por no tener un seguro. Por eso mi misión es evitar que otros pasen por lo mismo”.

Con apenas 28 años, Eddy ha vivido lo que muchos tardarían décadas en procesar. Venezolana de origen, llegó a Estados Unidos a los 17 y hoy es empresaria, conferencista y referente de liderazgo femenino en Miami. Lo que comenzó como una búsqueda de estabilidad terminó siendo una historia de reinvención, reinicio financiero y, finalmente, construcción de legado.

Hoy EV Insurance opera en 30 estados estadounidenses, protege a miles de familias hispanas y ha desplegado un equipo de 68 vendedores en un sistema automatizado de servicio. Ella habla de que pasó de cientos de clientes a más de 12.000 activos. Los servicios que ofrece abarcan desde seguros de salud individuales, grupales, Medicaid/Medicare, hasta seguros de vida, patrimoniales, suplementarios, de autos, viviendas, negocios e incluso mascotas. Todo bajo una filosofía clara: acompañamiento integral. El servicio no termina con la venta de una póliza, sino que implica desde la verificación correcta de datos hasta la gestión completa de citas, referidos y reclamos.

EV Insurance se destaca por tres pilares que Eddy repite con convicción: cumplir la palabra, brindar un servicio humano y facilitar la vida del cliente. “Si yo te digo que voy a estar para ti, voy a estar. La palabra es un contrato. No necesito firmar nada para cumplirte”. A eso se suma el compromiso de educar a su comunidad. Eddy considera que uno de los grandes retos culturales en la comunidad latina es que “la preparación ahora” no está en nuestro ADN. “Nos criamos con la idea de resolver el día a día, sin pensar en el mañana. Cambiar esa mentalidad es clave”, afirma.

Más allá de la facturación o de las cifras, lo que hace latir a EV Insurance es un propósito mayor: generar impacto. El 10% de lo que genera la empresa cada año va a EV Foundation, una fundación que ella misma alimenta y que ayuda a niños y ancianos en Colombia y Venezuela con alimentos y acompañamiento. “Para mí, una de las cosas más lindas es todas las familias y el empleo que generamos… eso no tiene precio”, afirma.

Eddy reconoce que, aunque ama el coaching y el mundo motivacional, su estabilidad económica y la de muchos depende de que su empresa funcione y crezca. El salto cualitativo llegó tras participar en un programa de maestría empresarial de Tony Robbins. Ahí aprendió que la información sin acción no sirve. Empezó a delegar, automatizar procesos y permitir que el negocio funcionara sin depender exclusivamente de su presencia.

Hablando del futuro, prevé un crecimiento del 20% anual de su cartera, una meta que considera saludable y sostenible. Es realista sobre los desafíos que enfrenta el mercado, especialmente para la comunidad latina, entre migración, desconfianza y barreras económicas. Pero tiene clara su misión y la sostiene con fe: “Dios es mi socio, no quiero otro”.

Su mensaje es claro: la prevención no es un lujo, es responsabilidad. En su visión, todo latino en Estados Unidos debería tener tres seguros esenciales: salud, vida y uno suplementario. Este último, explica, puede costar menos de 30 dólares al mes —lo que vale un café diario— y representa la diferencia entre enfrentar una emergencia con respaldo o quedar desprotegido. “Gracias a una póliza suplementaria, hay clientes que han recibido cheques de 30.000 o 40.000 dólares justo cuando más lo necesitaban”. Esas historias, asegura, son el verdadero valor de su trabajo.

En EV Insurance no se venden pólizas, se construyen puentes de protección entre la incertidumbre y la tranquilidad cotidiana de cientos de familias. Eddy Vera lo resume mejor que nadie: “Tengo un negocio que me genera el estilo de vida que quiero, y que le genera un estilo de vida a muchos corazones. Y tengo una pasión, que es lo que le da confort a mi corazón”.