El emblemático Dwayne “La Roca” Johnson sorprendió a todos durante su reciente aparición en el Festival de Cine de Venecia. Con un atuendo refinado y una figura visiblemente más delgada, el actor dejó atrás su habitual complexión musculosa, revelando una transformación impactante como parte de su papel en The Smashing Machine, donde interpreta al luchador de MMA Mark Kerr.

Johnson confirmó haber perdido cerca de 28 kilogramos para encarnar este personaje tan complejo y exigente. Su motivación fue clara: quería honrar la historia de Kerr de forma auténtica, rompiendo con su imagen habitual y abrazando un nuevo nivel de madurez actoral.
La transformación no solo fue física: en la conferencia de prensa, Johnson compartió que adoptó un enfoque disciplinado, cambiando radicalmente su bienestar desde adentro. Reconoció que lidiaba con problemas digestivos, lo que lo llevó a replantear la idea de la salud más allá del músculo y el rendimiento estético.
Reacciones y repercusiones
Las redes sociales estallaron con comentarios entre asombrados y preocupados. Algunos fans incluso creyeron que las imágenes eran generadas por inteligencia artificial, otros bromeaban que su figura se parecía más a “un guijarro que a La Roca”. Y mientras algunos cuestionaban su regreso al ring en la WWE, otros subrayaron el mérito artístico que conlleva desafiar su propia imagen pública.
La reacción más conmovedora ocurrió en la alfombra roja: The Smashing Machine recibió una ovación de pie de quince minutos, un gesto cargado de emoción que llevó a Johnson a las lágrimas, junto al director Benny Safdie y su coprotagonista Emily Blunt. Esta respuesta calurosa le otorgó tempranos visos de consideración en la temporada de premios.
Contexto: cuando el método exige sacrificio

Dwayne Johnson no es el primero ni será el último actor que lleve su físico al límite por una historia. Algunos ejemplos memorables incluyen:
- Christian Bale, quien perdió alrededor de 28 kg para The Machinist (2004), una dieta extrema que acarreó insomnio crónico y debilidad física.
- Matthew McConaughey, bajó 21 kg para Dallas Buyers Club (2013), un viaje transformador que le valió elogios y un Oscar.
- Jared Leto, redujo su peso en casi 13 kg para interpretar a una mujer trans en un papel que también le generó debilidad ósea y problemas inmunológicos temporales.
Estas transformaciones exaltan el compromiso con el arte pero también plantean preguntas serias sobre los límites del sacrificio físico y las consecuencias a largo plazo.