¿Amante de los gatos?, ¿Sabías que tienen estos poderes?


Los gatos tienen estos poderes, ¿los conocías?

Quien tiene gatos sabe lo fiel que puede llegar a ser. Son seres que forman una parte muy importante de nuestra familia y están con nosotros en las buenas y en las malas. Tener un gato como mascota no solo es bueno por la compañía que recibimos sino que tienen ciertos poderes que podemos catalogar dentro de lo “mágico”.

Sigue leyendo para enterarte cuáles son los poderes sanadores que tienen los gatos domésticos.

Hacen un sonido sanador

Los gatos ronronean y ese sonido lo usan para auto-curarse. Algunos estudios recientes revelaron que la frecuencia de ronroneo de los gatos iguala la frecuencia curativa de la frase “OM” cuando meditamos.

 

Equilibran nuestra energía

Los gatos, al frotarse contra nosotros, cambian las malas energías por buenas vibraciones. Eso, además, significa que nos tienen muchísimo afecto y que se encuentran en paz cuando están con nosotros.

Eliminan nuestro estrés

Todos, en algún momento de nuestra vida, sentimos estrés. Sin embargo, aquellas personas que tienen gatos aseguran que escuchar el ronroneo de un amigo felino ayuda a sentir relajación, evitar la ansiedad y, por supuesto, decirle adiós al estrés.

Dormirás como un bebé

Quienes tienen gatos te pueden decir lo mismo que te vamos a contar nosotros: los michufuces ayudan a conciliar el sueño. Prueba colocando un gato frente a ti por 5 minutos antes de dormir. Verás que eliminará la energía negativa y te dará una gran sensación de relajación y bienestar, que obviamente será sinónimo de conciliar el sueño.

Es el ansiolítico perfecto

Jugar con tu gato unos minutos al día hará que tu jornada sea menos agobiante. Además, está comprobado que son unos excelentes “psicólogos” pues, aunque no parezca, siempre te escuchan. Puedes contarles lo que sea que ellos, de inmediato, sabrán qué hacer para levantarte el ánimo.

Si aún no tienes un amigo felino, quizá es momento que pienses en adoptar uno. Además de la gran cantidad de amor, descubrimos que, ¡los gatos son terapéuticos!