Escrito por: Luisa Rangel
Desde los 16 años, Ani Miller supo que las finanzas no eran solo números: eran herramientas para transformar vidas. Su carrera comenzó como pasante bancaria en Venezuela, y hoy lidera Ani Miller Services, una firma multiservicios con licencia en los 50 estados. ¿Su diferencial? Haber vivido en carne propia cada obstáculo que hoy ayuda a resolver: desde estafas al comprar un auto hasta errores migratorios costosos. Con disciplina, empatía y visión, Ani convirtió cada caída en un nuevo servicio.

Desde su adolescencia en Venezuela, Ani Miller se sintió atraída por el mundo financiero al ver cómo una vecina prosperaba trabajando en un banco. Esa imagen la inspiró a inscribirse en un programa de formación laboral tras graduarse del liceo. Comenzó como pasante y, con tan solo 18 años, ya era empleada fija en una de las principales entidades financieras del país. A los 28, se convirtió en vicepresidenta de negocios. Pero su historia no se define por los títulos, sino por la empatía con la que ha sabido convertir cada obstáculo personal en un puente de ayuda para otros. En esta conversación, nos cuenta cómo surgió su vocación, cómo construyó su legado y qué la impulsa a seguir creciendo.
Llegaste a ser vicepresidenta de negocios. ¿Por qué decidiste migrar a Estados Unidos?
Ya había terminado la universidad y tenía una carrera consolidada, pero quería un nuevo comienzo, una vida distinta para mi familia. Llegué sin dominar el idioma y acepté cualquier trabajo para salir adelante. Hice entregas para Amazon, tomé cursos, aprendí inglés. Viví muchas situaciones difíciles que, con perspectiva, se convirtieron en los cimientos de mi empresa.
¿Es cierto que tu empresa nació de tus propias experiencias como inmigrante?
Totalmente. Me estafaron al comprar un carro por no entender bien el contrato. Me preparé para que eso no volviera a pasar y vi que podía ayudar a otros. Luego me pasó con los taxes: recibí una carta del IRS y la persona que me los había hecho no quiso ayudarme. Hice el curso, resolví el problema e incorporé ese servicio. Cada error fue una lección. Y eso es lo que ofrecemos: soluciones reales basadas en la experiencia.
¿Cuáles son hoy los servicios que ofrece Ani Miller Services?
Ofrecemos asesoría en la compra y venta de autos, compra y venta de inmuebles, orientación financiera, inversión, crédito, seguros (vida, salud, auto, responsabilidad civil, hogar, entre otros), preparación de impuestos personales y empresariales, planificación fiscal y trámites migratorios (ciudadanía, TPS, permisos de trabajo, peticiones familiares, etc.). Somos agentes de bienes raíces y oficiales de préstamos hipotecarios. Tenemos licencia en los 50 estados. Mi prioridad es que el cliente reciba una atención integral, con respeto, claridad y empatía.
¿Cuál ha sido el mayor desafío en este camino?
En 2021 tuve un accidente automovilístico muy fuerte. Estaba con mi hijo y el carro fue pérdida total. Eso me obligó a hacer una pausa, priorizar mi salud y mi familia. Me alejé de las redes sociales por casi tres años. Fue un momento difícil, pero también de reconstrucción. Decidí volver más preparada, más enfocada y con una visión clara del éxito que quería alcanzar.

¿Y qué es el éxito para ti?
Para mí, el éxito no es solo lo económico. Es ver que un cliente prospera, que sale adelante, y saber que fuimos parte de eso. Es poder ayudar, transformar realidades. Eso es lo que me llena.
¿Cuáles dirías que han sido las claves de tu crecimiento?
La disciplina. Tengo mi lista de pendientes, las cumplo, me organizo. Y la fe en uno mismo: si tú no crees en ti, nadie lo hará por ti. También el entorno: rodearte de personas que te apoyen, que vibren alto contigo. Eso marca toda la diferencia.
¿Qué sueñas a futuro?
A nivel personal, quiero retirarme joven y dedicar más tiempo a mi familia. A nivel profesional, quiero abrir oficinas en todos los estados. Ya estamos en Florida y Texas; pronto, en Colorado. Quiero seguir formando un equipo fuerte, donde cada persona pueda crecer. Acabo de crear una fundación para ofrecer becas y fondos a emprendedores. Quiero dejar un legado que trascienda.
¿Qué es lo que más te gratifica de tu trabajo?
Los mensajes de los clientes. Cuando me dicen que su vida cambió, que lograron algo gracias a nuestro apoyo. Eso no tiene precio. Tengo notas de voz que atesoro, donde me cuentan que compraron su primera casa, que lograron estabilizarse económicamente o que pudieron reunir a su familia. Me emociona saber que fuimos parte de ese proceso. Me llena ver que cada esfuerzo tiene un impacto directo en la vida de las personas. Al final del día, eso es lo que me impulsa a seguir creciendo.