Dedicar tiempo a hacer nada es una de las claves del éxito según expertos

Todos estamos de acuerdo que la época actual nos pide que hagamos miles de cosas al día. La mayoría de las personas opinan que, cuanto más ocupado se está, más cosas se hacen y, por lo tanto, más éxitos se logran. Esto no se consigue solo con hacer las cosas a tontas y a locas sin tener algo planeado, ¡claro que no!

Todo necesita de una planeación para saber los pasos a seguir a lo largo del día. Convengamos que alguien desordenado con sus tiempos, es alguien que nunca llega a hacer ni la mitad de las cosas que se propone. De acuerdo a la ciencia, un elemento imprescindible para ser una persona exitosa es ser organizado y planear absolutamente todo. Sin embargo, si la rutina llega a ser muy ajetreada, la creatividad se pierde, el cansancio aparece y el aburrimiento hace de las suyas. Es por esto mismo que muchas personas con éxito, dedican parte de su vida al “no tiempo”.

¿Qué es el “no tiempo”?

Steven Kotler, autor del libro “El arte de lo imposible”, explica que el “no tiempo” tiene que ver con un momento del día en el que cada persona lo pasa solitario y en silencio, aislado del ruido y de la rutina. De acuerdo a la ciencia, tener tiempo para uno mismo es tan necesario como ser organizado a lo largo del día.

De acuerdo a los expertos, para tener una vida próspera, es necesario realizar algunas actividades que sean agradables como caminatas al aire libre, escuchar música o meditar para entrar en contacto con uno mismo. Sin embargo, también aconsejan no excederse en la cantidad de “no tiempo” empleado, pues si se produce un exceso en la cantidad de horas dedicadas a esto, puede tener el mismo efecto contraproducente que no tener ni un minuto para dedicarse a la propia persona.

Albert Einstein
Einstein practicaba a diario el “no tiempo”.

De acuerdo a Kotler, “El ‘no tiempo’ es el término para ese vasto tramo de vacío entre las 4 a.m. (cuando comienzo mi sesión de escritura matutina) y las 7:30 a.m. (Cuando el resto del mundo se despierta). Este ‘no tiempo’ es una oscuridad total que no pertenece a nadie más que a mí. Las preocupaciones urgentes del día aún no han llegado, así que hay tiempo para ese lujo supremo: la paciencia. Si una frase tarda dos horas en hacerse bien, ¿a quién le importa?”.

En el libro, Steven Kotler afirma que la neurociencia a demostrado que el tiempo de desconexión con la rutina, presenta una gran influencia positiva por sobre la creatividad. “La presión obliga al cerebro a concentrarse en los detalles, activando el hemisferio izquierdo y bloqueando el panorama completo. Peor aún, cuando nos presionan, a menudo estamos estresados. Somos infelices con la prisa, que amarga nuestro estado de ánimo y restringe aún más nuestro enfoque. Estar limitado de tiempo, entonces, puede ser kriptonita para la creatividad”, asegura.

Para que tengas una idea de lo importante que es la rutina del “no tiempo”, podemos darte como ejemplo a Steve Jobs y a Albert Einstein. Ambos a diario practicaban el “no tiempo”, y muchas veces increíbles ideas venían a su mente en esos momentos de calma y tranquilidad que luego volcaban en sus trabajos. El propio Einstein tenía la certidumbre de que las ideas más importantes y valiosas surgen cuando no se hace nada. Por otro lado, Jobs era conocido como un gran holgazán, pues sus mejores pensamientos aparecían luego de largas meditaciones.

Si bien la rutina del “no tiempo” es muy valiosa para lograr grandes ideas, hay que tener en cuenta que no solo es cuestión de pensar lo que hay que hacer, sino que hay que tener la suficiente organización como para hacerlo todo correctamente. Si Einstein y Jobs pudieron, ¿por qué tú no? Comienza a practicar todos los días un poco de “no tiempo” y pronto notarás la diferencia.