Romper tabúes y prejuicios, ¿está nuestra sociedad preparada para dar un paso más frente a este tema?
“Esta revista se ha impreso con la sangre de personas VIH+. Ahora el asunto está en sus manos” Así la revista ‘Vangardist’ publicación alemana mensual, advierte a sus lectores sobre esta peculiar característica de esta su ultima edición.
Esta edición coincide en fechas con uno de los más grandes eventos mensuales que recoge fondos en pro de las investigaciones sobre el tema, El Life Ball- que tendrá lugar en el Vienna City Hall este 16 de Mayo, en Viena, ciudad de donde es originaria esta revista.
La publicación tendrá unos 18.000 ejemplares, pero solo 3.000 estarán sellados y tendrán esta advertencia, quien la compre tendrá en sus manos el poder de decidir si romper el empaque o no. El mensaje es claro, ¿esta nuestra sociedad preparada para romper los estigmas sobre el VIH?
Carlos Gómez, emprendedor colombiano, es uno de los fundadores de la revista ‘Vangardist’ y el comenta: “Queremos resaltar el tema de la exclusión social a la que muchas personas con VIH positivo se enfrentan, simplemente porque con la enfermedad siguen activos todo tipo de miedos irracionales de infección, aunque es prácticamente imposible a través del contacto social ordinario”.
El plan se ejecuto con el único fin de llegar a la sociedad y romper los tabúes y estigmas que existen sobre la enfermedad. La revista busco tres personas que estuvieran contagiadas con el virus y estuvieran dispuestas a donar su sangre. Esta sangre fue mezclada con tinta en laboratorios con la mayor seguridad para evitar riesgos de contagió, para posteriormente esta tinta ser utilizada para la impresión de 3.000 ejemplares de ‘Vangardist’.
Citamos a la revista: “Cuando tocas esta revista te das cuenta de que no puede hacerte daño, al igual que tocar a cualquier persona con VIH tampoco lo hace. Esperamos que esta experiencia pueda, en el futuro, cambiar tu comportamiento, porque todavía hay muchos que no beben de la misma taza de café de una persona VIH positiva, y ni siquiera estrechan su mano”.
