Entrevista Por: Luisa Rangel
Gloria Garcés es una mujer multifacética, comprometida socialmente y con un talento excepcional para conectar personas y generar cambios significativos. Nacida en Guatemala y con raíces cubanas, ha dedicado su carrera a promover el crecimiento estratégico y las comunicaciones, especialmente en causas sociales y humanitarias. Inspirada por sus padres, quienes siempre estuvieron comprometidos con causas comunitarias, Gloria se ha destacado como defensora de la justicia social y temas globales, como la lucha contra el antisemitismo y el apoyo a Israel.
Desde joven, Gloria demostró un gran interés por la comunicación y las artes, destacándose en la televisión y la radio en Guatemala antes de mudarse a Miami con su familia a los 16 años. Aunque la transición fue difícil, sobre todo por las diferencias culturales y el desafío de adaptarse a un nuevo entorno, Gloria encontró en su capacidad para conectar con las personas la forma de navegar esos años turbulentos.
Graduada Magna Cum Laude en la Universidad de Miami, Gloria inició su carrera en publicidad y marketing en el sector hispano, destacándose en la industria de la música y los medios. Fue vicepresidenta de One Voice Records, contribuyendo a la inclusión de las categorías de Música Cristiana en los Premios Latin GRAMMY. También se desempeñó como ejecutiva en Fuente Latina, una organización dedicada a informar sobre temas geopolíticos y sociales del Medio Oriente, consolidó su reputación como líder de pensamiento y estratega en la comunicación global.
Un aspecto destacado de su carrera fue su participación en la organización de iniciativas sociales durante el Super Bowl, donde Gloria jugó un papel clave en el manejo de relaciones gubernamentales y comunitarias. Lideró la campaña «No Sex Trafficking» (No al Tráfico Sexual), que unió a más de 300 organizaciones sin fines de lucro, entidades gubernamentales y fuerzas policíacas para crear conciencia sobre el tráfico humano y su aumento alrededor de eventos deportivos. Gracias a esta iniciativa, se logró la movilización para rescatar a más de 100 mujeres víctimas de tráfico sexual.
Su mayor legado es la creación de Nonagon Global, una empresa de consultoría estratégica enfocada en el crecimiento empresarial, el posicionamiento ejecutivo y la gestión de crisis. Ha asesorado a empresas en sectores como entretenimiento, tecnología, salud, finanzas y responsabilidad social corporativa.
Gloria se distingue por su capacidad para conectar personas de diferentes culturas e ideologías. A lo largo de su carrera, ha cultivado relaciones con líderes comunitarios, religiosos, celebridades y políticos en Estados Unidos, América Latina, Europa e Israel. Sus principios de vida, como «mientras más haces, más puedes hacer» y «cambia tu perspectiva, cambia tu vida», han sido la base de su éxito y su contribución a la sociedad.
¿Cómo defines tú el impacto?
Para mí, el impacto es dejar una huella positiva en el corazón, en la vida o en el futuro de una persona. El impacto puede ser bueno o malo, pero siempre debemos ser intencionales en hacer el bien. Cuando entendemos que al hacer el bien a los demás, también nos estamos haciendo el bien a nosotros mismos, eso es lo que guía mi trabajo con mis clientes. Las empresas deben pensar más allá de lo financiero y reflexionar sobre el legado que dejan. Si pueden impactar positivamente a sus clientes, entorno y comunidades, están haciendo un verdadero cambio.
Con toda la experiencia que has tenido, ¿cómo te defines hoy en día como Gloria Garcés?
Me defino como una persona con un propósito claro. Siempre he querido ser una vasija en las manos de Dios y servir a los demás. Me considero un canal de luz, un puente para que las personas se unan y conspiren para el bien. Mi misión es hacer el bien y contagiar a los demás para que también lo hagan.
¿Cómo ha transformado tu definición de éxito a lo largo de los años?
Para mí, el éxito es un proceso, un caminar. No se trata solo de alcanzar metas, sino de vivir con propósito, mejorar cada día y ser quien estamos llamados a ser. El éxito no es un destino, es una trayectoria. Es un proceso de crecimiento constante.
¿Qué proyectos sociales de impacto sueñas con alcanzar en el futuro?
Uno de mis sueños más grandes es ser embajadora de Guatemala en Jerusalén, Israel. Mi conexión con Israel comenzó desde joven y se ha fortalecido a lo largo de los años. He luchado por este sueño y me he sentido profundamente conectada con la historia de Israel y la defensa de su verdad.
¿Qué piensas sobre el liderazgo?
El verdadero líder es aquel que eleva a los demás. Un líder no se mide por cuántas personas tiene debajo de él, sino por cuántos líderes es capaz de crear. El verdadero liderazgo es empoderar a otros para que también sean líderes y contribuyan al bien común.
