Si alguna vez leíste algún cuento de hadas, la trama incluye, en la mayoría de los casos, el amor verdadero que sienten entre sí los protagonistas de la historia. Aunque no lo creas, este amor real también es posible sentirlo en la vida real sin necesidad de recurrir a un hechizo o sin tener que buscar a la persona soñada probando un zapato puerta por puerta.
Sin embargo, no siempre lo que consideramos como amor real es así y, en muchas ocasiones, se trata de un enamoramiento o de algo fugaz que dura por muy poco tiempo. Por fortuna, es posible reconocer el amor verdadero, es decir, el que es “para siempre”. A continuación, te contaremos cuáles son los tips que debes tener en cuenta para saber si estás frente a tu amor verdadero o no, ¡sigue leyendo!
Hay atracción mutua
Si bien esto puede pasar en las relaciones fugaces, en el amor verdadero es una regla que nunca falla. No hablamos de la atracción física, que obviamente no falta, sino que nos referimos a algo más profundo y, por decirlo de alguna manera, espiritual. De acuerdo a una investigación de 2015 realizada por Gurit E Birnbaum del Centro Interdisciplinario (IDC) Herzliya y por Eli J. Finkel, el deseo sexual se transforma en verdadero amor cuando se presenta dicha compatibilidad.
Todos los planes que hacen los disfrutan como si fueran verdaderos amigos
Es amor verdadero cuando cualquier salida, por más que sea al supermercado o a hacer un trámite, se transforma en algo divertido. El amor no es solo atracción física sino también alegría y pasarla bien con el otro.
Se parecen más de lo que crees
Si bien cada uno puede tener sus ideas propias, cuando se trata del verdadero amor, en muchos aspectos ambos se parecen, ya sea que se trate de planes a futuro o en la forma en la que realizan las actividades diarias. No hablamos de que se parezcan físicamente, sino más bien que piensen de la misma manera o que tengan ideas acerca de qué hacer con su vida que sean similares.
Los pequeños gestos son más importantes que los regalos costosos
Para una pareja verdadera, los regalos caros e impresionantes quedan siempre de lado. De acuerdo a los psicólogos, cuando esto ocurre y se le presta más atención a los regalos que a los gestos cotidianos como un abrazo o un beso, esto significa que la pareja no está afianzada y que no sería amor del real.
Ambos están dispuestos a sacrificar algo
No hablamos que sacrifiquen grandes cosas, sino que ambos están dispuestos a cambiar algo de su carácter por la otra persona. Por ejemplo, si eres de esas personas que aman salir de fiesta, quizá cuando conoces al amor verdadero, esto cambia y ya no te parece bien salir tanto como antes…hablamos de ese tipo de sacrificios. Quizás lo hiciste sin darte cuenta, pero si te pones a analizar, es más que seguro que algo hayas cambiado, para poder amoldarte a la nueva relación.
No hay mentiras
Los engaños, los celos y las mentiras no existen en su relación de pareja, pues se basa en el respeto y en la honestidad. Si hay mentiras entre ambos, es porque uno no se siente tan comprometido como el otro y eso, a largo plazo, hará naufragar la relación.
Ambos son totalmente libres
Esto es fundamental para conocer si tu pareja y tú sienten amor verdadero, pues la libertad para hacer lo que deseen con su vida es algo primordial. Esto, siempre que se trate de algo positivo, ¿verdad? En una verdadera pareja las recriminaciones, los celos y las manipulaciones no existen.
