El vestuario de Blonde fue todo un desafío, te contamos por qué

 

El pasado 16 de septiembre se estrenó la tan esperada película “Blonde”que cuenta la historia de Marilyn Monroe desde una perspectiva diferente donde se mezcla la realidad con la ficción. El film está protagonizado por Ana de Armas y se basa en la novela homónima escrita por Joyce Carol Oates.

Esta diversidad le permitió a la diseñadora del vestuario, Jennifer Johnson, tener un mayor espacio como para realizar nuevos modelos. “La película es una mirada al interior de su psique, así que había un margen de maniobra” y agrega “Hay dos Marilyns en nuestra película: está Marilyn y está Norma Jeane.

No fue nada fácil diseñar el vestuario para la película, a pesar de que Johnson tiene una gran experiencia en otras películas como “Yo, Tonya”, por ejemplo.

El proyecto le fue dado solo un mes antes de comenzar la filmación, lo que le obligó a investigar en forma exhaustiva. Al respecto, la diseñadora confesó que imprimió el guion y pegó las hojas en las paredes de su estudio. Posterior a eso, vio todas las películas de Monroe y además recopiló imágenes de la diva con sus mejores vestidos, los cuales tuvo la intensión de recrear. “Entender la construcción de los vestidos fue una tarea enorme, fue necesario investigar mucho para que los vestuarios cobraran vida de una manera que no parecieran un disfraz, y que resultara realmente natural para Ana.

Durante las escenas en las que Ana de Armas interpreta a Norma, los vestidos eran minimalistas. “Norma Jeane (…), no estaba obsesionada con la ropa. Era importante encontrar el mayor número posible de fotografías de ella y luego rellenar los espacios en blanco de lo que podría haber llevado realmente.

Durante “Blonde” hubo varias escenas de glamour que incuían las famosas faldas con vuelo y vestidos plisados que son tan conocidos por todos. Estos, aunque parezca increíble, fueron un gran reto para la diseñadora que expresó, “Es una tarea estresante tomar algo que ha sido diseñado por algunos de los mejores creadores de Hollywood” comentó en referencia a William Travilla uno de los principales diseñadores de la 20th Centyury Fox. El mismo fue responsable de idear el vestido rosa sin tirantes de “Los caballeros las prefieren rubias”. Otra de sus creaciones fue el maravilloso vestido blanco con falda plisada que uso en “La comezón del séptimo año”, que es el de la famosa escena en la rejilla del metro.

Para la película, Johnson recreó los dos modelos y comentó “Una vez que empiezas a investigar los materiales y cómo se construyó, ves que todo era extremadamente complicado. Se trataba de conseguir esos detalles para honrar esos diseños originales.

Algo que tuvieron que adaptar fue la figura de Ana de Armas a la silueta de Marilyn Monroe, sin utilizar prótesis de ningún tipo. “Hubo pequeños trucos que hicimos con la confección para que Ana tuviera más curvas”, comentó Johnson. Su principal fin fue que la actriz se sienta cómoda con el papel y para esto debió adaptar muchos modelos que uso la icónica diva. “No se ve en la película, pero realmente intenté darle a Ana pequeños momentos que la ayudaran a meterse en el personaje.

La diseñadora también se encargó de crear el calzado con la ayuda de un zapatero de Western Costume que colaboró con la adaptación para que parezcan de los años 50. “Él desarmó todo hasta que se quedó solo con el esqueleto de los zapatos, luego tiñó el cuero y volvió a forrar los tacones”, comentó.

De acuerdo a Johnson, la ropa que usaba Marlyn era muy ceñida, “A veces ni siquiera se daba cuenta de lo que llevaba puesto”, dice. “Siempre se trataba de cómo tenía el pelo y cómo mostraba su cuerpo. Casi que te la puedes imaginar desnuda”, finaliza.